Conformismo o Perfeccionismo?

Publicado: el miércoles 11 de junio de 2014 | Por: Francisco

Qué crees que sea peor? Ser una persona conformista o una persona perfeccionista?

Antes de iniciar creo que es importante aclarar que no hay una regla que defina qué es una persona conformista o perfeccionista. Es algo que dependerá siempre de quien emite el juicio, así que cada quien tendrá su propia opinión al respecto de quien cae en uno u otro extremo.

Empecemos por comentar que se puede considerar una persona conformista. Una persona conformista es alguien que pudiera considerarse por algunos mediocre pero no necesariamente ella misma se considere de esa forma. Es una persona que no aspira a grandes cosas probablemente, pero tampoco las considera necesarias. El problema principal con una persona conformista se presenta cuando tiene un potencial desaprovechado ya que su conformismo le hace desaprovecharlo y sentirse “satisfecha” con su situación actual. Lo interesante o la clave sería saber en cada caso si esa “satisfacción” es real o es más bien un escudo para no esforzarse más, para evitar posibles fracasos, etc.

Por ejemplo, imaginemos a una persona que tiene un gran talento natural para jugar al futbol (A propósito del mundial que se acerca). Ese talento lo ha llevado a representar a sus escuelas e incluso llegó a ser un jugador profesional sin mucho esfuerzo gracias a su talento. Sin embargo, tiene la capacidad de desarrollarse más y podría incluso ser seleccionado para representar a su país. Su techo es todavía es muy alto pero prefiere “llevársela tranquilo” siendo un jugador de banca en su equipo actual lo cual le da un ingreso suficiente para él y su familia. Además, sin tanto esfuerzo puede convivir poco más con su familia y amigos, no requiere de entrenamientos tan pesados, lidiar con la prensa, etc. En otras palabras, está conforme.

Por otra parte,  una persona perfeccionista es alguien que nunca está conforme con lo que hace. Siempre lo quiere hacer perfecto y se esfuerza en lograrlo. El problema en este caso es que la perfección no existe. Un problema de una persona perfeccionista es que no diferencia entre lo perfecto y lo excelente. Lo excelente existe. Lo perfecto no. Esto le hace que invierta tiempo en exceso a cuestiones que ya no le reditúan, o incluso esto le hace que se paralice y que no actúe porque “no está listo”. En economía existe una ley llamada de “rendimientos decrecientes” que dice que el beneficio adicional obtenido por el esfuerzo realizado es cada vez menor y esto aplica a muchos aspectos. Por ejemplo, si tenemos mucha hambre, una hamburguesa o una pizza en ese momento nos genera un gran beneficio, pero la segunda ya no, incluso llegando al punto donde el beneficio es nulo.

Utilizando nuevamente el ejemplo del futbol pero en el otro extremo, imaginemos ahora a un jugador perfeccionista. Probablemente sea muy talentoso y a la vez perfeccionista. Esa búsqueda de la perfección lo hace practicar sus tiros, sus pases y remates una y otra vez pero no queda convencido y siempre cree que lo puede hacer mejor. Esto lo ha llevado a ser el mejor jugador de su escuela, sin embargo, cuando le comentaron que debiera ir a probarse con un equipo profesional, su respuesta fue que no estaba listo. Necesitaba mejorar sus habilidades antes de probarse. Así continuó y nunca jugó profesionalmente.

Los ejemplos probablemente son extremos y exagerados pero los podemos usar como analogía a diferentes situaciones que se presentan.  El trabajador que hace todo nomás para “salir del paso” y que por lo mismo nunca es considerado para un ascenso y el trabajador perfeccionista que se desvela “decorando” una presentación cuya “decoración” nadie valora ya que solo les importaban los números.  El conformista que es feliz porque disfruta de la vida, pero a un nivel limitado por su desempeño,  contra un perfeccionista que tiene un desempeño excelente (no perfecto) pero que nunca está contento y que además sacrifica el disfrutar de la vida.

Cuál es mejor? Cuál es peor? Cuál prefieres ser? Con cuál te identificas más?

Creo que cada quien tiene diferentes metas y ambiciones en la vida, pero creo también que los extremos siempre son malos. Lo importante es estar conscientes de estas situaciones para evitar caer en esos extremos. Y a fin de cuentas el éxito debe ser medido en base a nuestros resultados pero en función de nuestro potencial. No queramos hacer más de lo que podemos, ni desperdiciemos nuestros talentos y capacidades.

Saludos!

Francisco Duarte

Crece Coaching & Consulting Empresarial

 

 

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