Asumir Responsabilidad
Publicado: el miércoles 12 de septiembre de 2012 | Por: Francisco
“Si nunca es nuestra culpa, no podemos tomar responsabilidad por ello. Si no podemos tomar responsabilidad por ello siempre seremos su víctima” – Bach
Toma una pluma en tu mano. Suéltala. Por qué cayó? Existen dos posibles respuestas: Una es “Por la fuerza de gravedad”, la otra es “Porque yo la dejé caer”.
Entre ambas respuestas existe una gran diferencia. Esta diferencia es el asumir nuestra responsabilidad de lo que sucedió y no atribuirlo todo a factores externos. Probablemente al dejar caer la pluma no culpemos a la gravedad. Pero ahora imagina que vas a una reunión importante con un cliente a la cual debes llegar en 10 minutos pero te encuentras con un embotellamiento que te detuvo 20 minutos. Por qué llegaste tarde a tu cita y perdiste a tu cliente? Por el tráfico o porque decidiste salir a tu reunión con el tiempo justo sin preveer un posible problema de tráfico? Probablemente son dos ejemplos extremos pero el punto importante es que en los dos tenemos responsabilidad. Si la asumimos o no es otro asunto.
Responsabilidad significa “habilidad para responder”. Responder a nuestras acciones. Responder a nuestras decisiones. Responder a todas esas decisiones y acciones que nos han traído hasta donde estamos en este momento. No somos efecto de la casualidad. Somos efecto de la causalidad!
En su libro “La empresa consciente”, Fred Kofman toca este punto a profundidad y menciona que tenemos dos opciones: Asumir el papel de víctima o asumir el papel de “jugador”.
La víctima es aquella persona que atribuye todo a factores externos. El jugador es quien se enfoca en aquellos factores que puede controlar.
La víctima busca excusas y como defenderse. Prefiere no tener otra opción que vivir lo que le pasa. El jugador busca la libertad de poder decidir lo que le pasa y la capacidad de responder a las situaciones.
Paradójicamente, el no tener poder de decisión es más cómodo que tenerlo. El problema es: Qué nos dará mejores resultados?
Mientras vivamos nuestra vida como víctimas quejándonos de lo que nos pasa y buscando en los demás y en el exterior la razón de nuestros problemas difícilmente los vamos a poder resolver. Si los problemas están 100% allá afuera entonces no tenemos nada que hacer sino esperar que el destino decida lo que sigue para nosotros.
Pero si “jugamos” nuestra vida y asumimos nuestra responsabilidad y nos vemos como parte del problema, esto significa que también somos parte de la solución! Mientras no nos veamos como parte del problema entonces nunca podremos ser parte de la solución. Reafirmo: Si soy parte del problema, soy responsable de los que me pasa y entonces soy parte de la solución.
Con esta mentalidad podremos trabajar en aquello que esté a nuestro alcance corregir o mejorar sin preocuparnos por aquello que no podemos controlar.
El resultado será sin duda alguna sorprendente.
Cuanta gente no conocemos (o somos!) que buscamos en el gobierno, en el tráfico, en la crisis, en la pareja, en la familia, en los vecinos o hasta en el clima el origen de nuestros problemas? Por qué mejor no pensar en ser mejor ciudadano, salir con más tiempo a mis citas, ser más comunicativo con mi pareja, más paciente con mis hijos, menos agresivo con mi vecino y salir con un paraguas por si llueve!
Lo externo siempre estará ahí. Y sabes qué: Está ahí para todos! No nomás para mí o para ti.
La respuesta está en nosotros. En nuestra habilidad para responder. Eso es responsabilidad.
Responsablemente…
Francisco Duarte – Crece Coaching & Consulting Empresarial